20.4.09

Love, Gym & Cachemira

Mientras escuchaba la nueva telenovela amorosa, sensual, casual y 'necesaria' de uno de mis mejores amigos, simplemente pensaba en que tanto él como yo, somos demasiado azotados en esas cuestiones del amor. Ni modo, eso de ser filósofo (o intentar serlo) es un poco complicado. Con un carácter de artista frustrado se intenta explicar la vida en alegorías, metáforas, destino, parábolas, azar y demás cosas tan complicadas. Cuando en realidad  las cosas son más sencillas. A veces pienso que todo sería más adecuado si hubiera escogido una carrera más ‘normal’, pero ni modo, lo exótico y lo que está fuera del mainstream es la constante espontánea de mi vida (nuevamente una explicación compleja para decir que no tengo idea  de nada).

Antes de hablar con mi compa de ascendencia menonita fui al gimnasio. Tras una ausencia de dos semanas retomé el camino virtuoso del sagrado ejercicio. Evidentemente subí de peso. Nada grave, la verdad sólo subí un kilo y medio, y de hecho estaba por debajo de mi peso. Todo sería felicidad si ese kilo y medio lo hubiera subido en masa muscular, pero no. Todo se concentró en la remesa nutricional de mi abdomen.

Previo al Gimnasio, tuve clase en mi diplomado sobre Conflictos Contemporáneos. El tema de hoy fue Cachemira. La verdad ya sabía un poco de esto. Sin embargo, la ponencia de este sujeto fue extraordinaria. Y más que darme esperanzas de que el mundo tiene soluciones. La verdad me deprimió la situación que se vive en esa región asiática. (¡malditos chinos! La verdad poco tienen que ver en este asunto pero también es cierto que tienen la culpa de muchas cosas).

Por lo pronto, de manera naive y sin argumentos, seguiré pensando que el mundo se puede cambiar. Y continuaré con mi propósito de conocer de cerca alguno de estos conflictos que tanto me atraen. No por morbo ni por un gusto enfermo por la violencia. Sino porque todo mundo opina sobre estos temas tan delicados y poca gente los conoce realmente de manera holística; Franja de Gaza, Afganistán, Cachemira, Somalia, Kosovo, Cáucaso, Sudán, etc.

Pero bueno, mientras trato de concretar mis proyectos de filósofo militar (que tanto me critican y me tiran de loco) por lo pronto, ya me prometieron llevarme a los cuerpos de paz de la ONU en África, en un futuro no muy lejano y tampoco tan próximo. Espero no se me vayan a echar para atrás a la hora buena.

Es un hecho: Debí haber sido militar, y la Filosofía está sobrevalorada (…..sólo un poco).



1 comentario:

Anónimo dijo...

wow justo hoy tuve la misma sensación de no saber nada del mundo